Este libro colectivo retoma un tema ya antiguo en la historia social para adaptarlo a nuevas perspectivas, ámbitos, fuentes y métodos. Se interesa en el estudio de los oficios en los entornos novohispano y andino: en sus orígenes, relaciones laborales, técnicas, saberes, productos y la condición social de quienes los ejercían. Las distintas contribuciones emplean recursos cuantitativos, pero también se acercan a los trabajadores "de carne y hueso". Los oficios estudiados no son solamente los clásicos -como los mineros, marineros y obrajeros- sino también otros que habían pasado casi inadvertidos, como los jicareros, recolectores de miel y las mujeres comerciantes. Asimismo, se incluyó a otros -los párrocos, médicos y "oficiales de pluma"- que podían ser parte de la elite, pero compartían situaciones y condiciones que hacían posible considerarlos dentro del variado mundo de los oficios. El conjunto permite renovar y poner al día el fascinante panorama del mundo laboral indiano.