Los recursos hídricos en México no siempre estuvieron centralizados o bajo el control legal del gobierno federal. Este libro aborda el proceso y el impacto que tuvo la injerencia federal en el manejo y la gestión de las aguas en el valle de Etla, Oaxaca, a partir del Porfiriato y hasta la posrevolución. Durante este lapso, a las formas tradicionales de los usos y el aprovechamiento de las aguas como energía en los molinos de trigo, en los trapiches de caña y en la irrigación se sumaron otros como los urbanos e industriales. Éstos repercutieron tanto a nivel nacional como estatal y el caso de Oaxaca no fue la excepción. El aumento en la explotación, la demanda y el consumo del agua propiciaron distintos conflictos de orden social y político que pusieron de manifiesto las diferentes formas en que los hacendados, pueblos, industriales, autoridades locales, estatales y federales argumentaron sus derechos para tener acceso a los usos del agua en una época de transición como lo fue el último cuarto del siglo XIX y las primeras décadas del XX.